La continua disputa sobre la caballa que mantiene enfrentadas, por un lado, a la Unión Europea y Noruega y, por el otro, a Islandia y las Islas Faroe “podría definir el futuro” de la flota pesquera pelágica escocesa, según la Scottish Pelagic Fishermen’s Association y la Scottish Fishermen’s Federation.
Los comentarios de estos grupos llegan en la semana en la que los funcionarios de pesca se reúnen en Londres. En juego está la resolución de la disputa sobre la decisión tomada por Islandia e Islas Faroe de aumentar sus cuotas de caballa este año de manera significativa.
Además de la protesta de los pescadores y políticos escoceses, la comisaria europea de pesca y asuntos marítimos, Maria Damanaki, ha denunciado recientemente los aumentos de cuota, calificándolos como “poco menos que inaceptables”.
Ian Gatt, director ejecutivo de la Scottish Pelagic Fishermen’s Association, calificó las conversaciones de esta semana en Londres como un “momento decisivo” para los pescadores escoceses.
“Hemos visto cómo la pesca incontrolada ha afectado a los bancos de bacaladilla, y las últimas recomendaciones científicas recomiendan un amplio recorte en la cuota del 93% para el año que viene. No debería permitirse que esto ocurra con la caballa, y es fundamental que se alcance un acuerdo razonable esta semana”, afirmó Gatt.
